¡Primero mis hijos! ¿Y yo?

Como madres siempre queremos y procuramos lo que consideramos mejor para nuestros hijos, deseamos que sean mejores que nosotros.
Sé que todas ustedes harían lo que sea por sus pequeños, su bienestar, salud, felicidad, etc. Hasta podrían quedarse sin comer con el único fin que a ellos no les falte bocado; si, así de entregados somos padres y madres.

¡Primero mis hijos, incluso antes de mí! He escuchado esa frase desde siempre, cosa que me parece un tanto bien, ya que debemos tener siempre presente que somos madres y que esas pequeñas personitas que trajimos al mundo dependen de nosotras, somos un ejemplo a seguir y todo lo bueno o malo que hagamos va a repercutir en sus vidas, de ello depende muchísimo la clase de adultos en los que se convertirán en el futuro.

Ahora si explicare porque  dije que me parecía ``un tanto bien´´ en lugar de ``me parece lo mejor e ideal´´; pues en nuestro afán por darles el mayor bienestar, llegamos a olvidar la dicha propia, si bien es cierto, ver felices a nuestros pequeños nos satisface por completo (como se los conté en un post anterior) pero, ¿podremos criar hijos felices si nosotras no lo somos en el ámbito ``mujer´´? ¿está bien solo buscar verlos sonreír sacrificando lo que nos gustaría hacer? Ya sea trabajar, viajar, ir de fiesta de vez en cuando, estudiar, crecer profesional y laboralmente, juntarse a chacotear con las amigas, etc. Yo estoy segura que no. (Es mi punto de vista.)

En una ocasión, una actriz exitosa madre de un joven y una nena, fue abordada con la pregunta: ¿Cómo haces para llevarte tan bien con tus hijos? ¿Cómo es que siendo madre soltera has logrado hacerlos felices? Ella la tenía clarísima: ``Pues me dedique a ser feliz yo, a trabajar en lo que amo, y a disfrutar cada momento que tengo libre para ellos; sabía que debía preocuparme en sentirme realmente plena para que ellos lo sean´´, eso me era exactamente lo que yo quería, deseo ser feliz para que Emanuel también lo sea, quiero retomar mis estudios, tener un buen puesto de trabajo y porque no, juntarme con mis amiguis jajaja sé que todo eso demandara tiempo y estaré menos con mi ratón (como me lo repite siempre mi esposo) pero, ¿qué vale más? ¿pasar todo el día juntos añorando algo y sintiéndome frustrada por no haberme realizado como deseaba o pasar pocas horas pero llenas de carcajadas, siendo felices ambos? Tiempo de calidad, como diría una buena amiga. Yo prefiero lo segundo!